Siente el mismo dolor

Me costó mucho tiempo dormir y finalmente lo logré, pero la mañana llegó tan pronto que parecía que había cerrado los ojos por un segundo. Comí la sopa que Mamá me trajo a mi habitación y me fui directamente a la cama, pero mi mente estaba completamente despierta con todos los pensamientos y posibilidades.

Necesito llegar al fondo de mis Visiones y del incidente que me ocurrió ayer.

Me aseé y bajé a desayunar con mi familia. Me siento fresca y viva desde ayer. Los poderes en mí recuperaron energía y parecía que lo de ayer no había sucedido.

—¡Buenos días, cariño! ¿Cómo te sientes?— preguntó Mamá, colocando los platos en la mesa. Le di una sonrisa brillante y fui a la cocina para ayudarla.

—¡Me siento bien, Mamá!— Llevé los platos de huevos, tostadas y frutas a la mesa y tomamos asiento.

Papá fue el primero en llegar a la mesa, al verme su rostro se iluminó y una gran sonrisa apareció en su cara. Reaccioné de la misma manera, ya que soy la princesa de Papá.

—¡Estoy tan feliz de que te veas tan bien, Aiza!— Me besó en la frente y tomó asiento a mi lado. Eliot y Elijah entraron a la cocina y me dieron un abrazo y un beso en ambas mejillas antes de sentarse.

—¿Vas a ir a la escuela hoy?— preguntó Elijah, mientras comía sus huevos y tostadas. Masticaba mi comida y la tragaba antes de responder a su pregunta.

—Sí, voy a ir—. Él solo asintió y volvió a su comida, pero Eliot me advirtió en silencio con la mirada sobre nuestro acuerdo de confesar todo a nuestros padres. Entrecerré los ojos y lo ignoré.

—¡Cariño! Creo que deberías descansar hoy— sugirió Papá. Puedo entender su preocupación, pero no puedo faltar en mi segundo día y los niños perderán interés si no asisto regularmente a la escuela, además tengo que ir a la biblioteca de nuestro clan para investigar sobre las visiones y el incidente.

Nunca he investigado sobre mis visiones, ya que generalmente parecen inofensivas y no quiero meterme en un laberinto y quedarme atrapada, pero con lo que está pasando, debería profundizar en ello.

—No puedo hacer eso, Papá, es mi segundo día y no puedo faltar, además estoy totalmente bien— le aseguré con una gran sonrisa.

Terminé mi desayuno y salí de nuestra cabaña despidiéndome de Mamá, Papá, Eliot y Elijah. Mamá me empacó un sándwich para comer. Mi familia todavía me trata como si fuera una bebé, pero tengo 23 años y puedo cuidarme sola.

Nuestro clan está rodeado de espesos bosques y hay diferentes tipos de árboles a mi alrededor. Me encanta el olor del bosque y la tierra. También hay otras especies viviendo a nuestro alrededor, pero estamos separados por nuestro hechizo de protección lanzado alrededor de nuestro clan.

También tenemos un rey que nos gobierna manteniendo un equilibrio entre todas las diferentes especies y él mismo es un Demonio, hijo de Lucifer y Eva.

He oído mucho sobre él y sus formas de gobernar, y las historias de las guerras espantosas que libró contra los enemigos. Nunca hemos visitado el palacio, pero siempre que tenemos un problema o necesitamos algo, tenemos un anciano en nuestro clan que visita al rey en nombre de todos nosotros.

Mientras caminaba por el bosque, mis manos picaban por liberar mi magia. Giré mis dedos en el aire e imaginé en mi cabeza lo que quería, y mi boca soltó los hechizos para crear mariposas y flores. Hice eso durante todo el camino a la escuela. Me encanta crear cosas, especialmente mariposas.

Llegué a la escuela y los niños ya estaban sentados pacientemente esperándome. Una gran sonrisa apareció en mi rostro y me dirigí con entusiasmo a la clase para saludar a los niños.

—¡Buenos días, niños!

—¡Buenos días, señorita Aiza!— Todos me saludaron de vuelta con sus grandes sonrisas. Sus sonrisas calentaron mi corazón y olvidé todas mis preocupaciones.

Ellos son como una terapia para mí.

Revisé todo lo que les enseñé ayer y les mostré algunos hechizos mágicos para crear mariposas y levantar pequeñas cosas en el aire.

Todos estaban tan asombrados por los trucos de magia que tenían estrellas en los ojos. Verlos a todos maravillados y emocionados me hace amar lo que estoy haciendo.

—Ustedes también podrán hacer estos hechizos cuando tengan 14 años— les informé y les pedí que aprendieran los hechizos y los recitaran en la clase de mañana. Es su tarea.

Todos salieron de la clase y comencé a recoger todas mis cosas de la mesa y a ponerlas en mi bolsa. Subconscientemente, algo me molestaba en la cabeza, como si algo fuera a suceder, pero no sabía qué era.

Cuando puse la última cosa en mi bolsa, mi cuerpo comenzó a calentarse y mi estómago empezó a sentirse como si alguien lo estuviera picando con agujas. Sé lo que va a pasar, así que corrí rápidamente hacia la puerta y la cerré con fuerza, sujetándome el estómago.

Cerré todas las ventanas y el dolor en mi estómago se intensificó y mi cuerpo comenzó a sentirse como si estuviera ardiendo en llamas. Tropecé y caí al suelo, encogiendo mi cuerpo en posición fetal para detener el dolor que mi cuerpo estaba experimentando.

Era algo más soportable que ayer porque sabía lo que iba a pasar, pero ayer no estaba preparada. Hoy, mi cuerpo y mi mente están preparados, así que es un poco más soportable, pero el dolor y la intensidad del ardor son los mismos que ayer.

No sé cuánto tiempo ha pasado, pero todavía estoy en la misma posición en el suelo, con la mano apretada sobre mi boca para no hacer ningún sonido y que la gente no se entere.

Mis ojos comenzaron a cerrarse y en poco tiempo se cerraron por sí solos.