Capítulo 177

La mañana llegó al Castillo de Chamonix con una luz suave y dorada, típica de Provenza. El aire estaba fresco y claro, cargado con el aroma de pinos y tierra húmeda. El primer día de vacaciones sería dedicado a la exploración, y Ariel había decidido que el desayuno sería el punto de partida, un ritu...