Capítulo 49

Esto no está pasando, ¿verdad?

Una de mis piernas está literalmente sobre la mesa, y él me está mirando.

Sus ojos grises son hipnotizantes pero malvados.

—¿Qué me dijiste, niña?

La voz ronca es otra presión.

¿Qué está haciendo, por favor?

No puedo ni moverme.

Me atrapó, pero va más allá de él...

Login to Unlock ChaptersPromotion